Anoche, cuando iba a tirar la basura, he visto un animalito, en medio de la calle, luego cruzándola, y finalmente ponerse a la vera de un portal, que venía para mí, y se ha desviado para una puerta, como si quisiera entrar y no supiera que está cerrada, que es metálica, negra y que allí no vive nadie... Creí, por la poca luz, que era una comadreja o algo así, un hurón o algún bicho similar... ¡¡Pero era un gatito algo delgado!! Me he ido a tirar las bolsas y he visto, sobre el alféizar de la ventana de un solar grande, una gata que me miraba... He vuelto, de tirar mi basura de plásticos y latas y similares en su sitio, y la biológica en el otro, y he sospechado que el gatito me esperaba en el portal, agazapado en un rincón, como queriendo encontrar huida haciéndose uno con la pared enrinconada. Lo he ido a coger y me he hecho ¡¡¡fuuuuuu!!!, ¿ei?, he dicho, no y no, que soy tu amigo... El gatito ha estirado el cuello, oyéndome, y he visto que era precioso. La gata se bajó a la calle, de su sitio en la ventana, y nos miraba desde lejos, con atención, rabo gacho y cabeza elevada en disposición de ataque o suprema atención... He cogido al gatito, que no me ha arañado. Lo he cogido como las madres suelen cogerlos, por el pellejo del cuello, y lo he tenido en suspensión un ratito, no se movía, y maulló, la gata le respondió, luego pateó algo, leve. Lo he cogido con la mano y me lo he llevado al pecho, se me acurrucó, y temblaba de miedo y emoción su corazoncillo... Estaba como llorando; pero luego me di cuenta que eran los ojitos, que tenía malos, que es común en gatos pequeños... He pensado dejarlo ir, que se fuera con la madre, no cogerlo, sabiendo que es posiblemente un gato nacido en el solar, un gato callejero y al viento... Pero luego he pensando que tal vez el destino he hecho que me encuentre con él para que se quede conmigo. Que nos encontremos. He mirado que era un macho, color gris como atigrado, muy bello y de poderosos huesos, con el rabo recogido, terminando en negro... Me miraba con unos ajillos azul verdosos y lloriqueantes... Estaba duro y parecía bien alimentado, aunque en crecimiento y en ese estado delgaducho en que los gatos están cuando son peques...
Me lo he pensado mientras llegaba, con el gatino en el regazo de mi pecho, hasta una esquina, en la que, a la izquierda, tomo para mi casa, si me lo quedaba o no. Estaba en la encrucijada de cuatro calles, la Curtidores, la de las Tenerías (que el ayuntamiento de Llerena tan sabiamente asesorado ha eliminado su antiquísimo nombre popular o de la gente), la calleja del portillo de Frasco Vaca, que desemboca en la muralla donde estaba el portillo susodicho, y la calle Alcantarilla. Debo tirar para la dirección de la calleja de Frasco Vaca, para, a la derecha, desembocar en Torviscal, mi calle…
Mañana tenía que ir a Sevilla... Y esto del gato me ha emocionado tanto... Veo que la gata viene tras de mí, que estoy ya en la esquina de esas cuatro direcciones. La gata, la madre, llega hasta la esquina donde espero, y se entra en una casa abandonada, que tiene la puerta medio rota y con entradas para gatos, que da la calle Curtidores y hace esquina con la calle de las Tenerías. Desde dentro de esa casa maulla y llama al gatino. Éste le responde unas dos veces. Oigo a la gata como anda por la casa en ruinas, y se asoma a una ventana, luego a otra..., se sale y vuelve. Lo decido, me voy con el gatito para mi casa. La gata está de acuerdo y se olvidará de él en cuanto me lo lleve. Efectivamente, cuando comienzo el camino de mi casa la gata sale y se va en dirección contraria, calle Curtidores arriba, mirando de cuando en vez para atrás... Aprieto el paso con el gatito y llego a mi casa, sin dejar de mirar para atrás, por si la gata...
Llego a casa, busco leche, recién abierta pues la del frigo estará fría, y le echo de beber en un tazón para vinos blancos gallegos, lo primero que encuentro apropiado. No sabe, o está tan nervioso que no sabe o no acierta beber, o no quiere, que también lo estoy... Lo meto en una caja grande de cartón que me traigo de la cochera, y se acurruca en un rincón, luego lo agarro y le meto un poquito el morro en la leche, se relame y comienza a beber subido en la encimera de la cocina, a sorbos con lengüetazos, como hacen los gatos...
Luego le he hecho fotos, no muy allá, la verdad; pero la improvisación da eso. Estoy verdaderamente emocionado. Cojo el teléfono y llamo a Paula Deben ser como la una de la madrugada entre unas y otras cosas y creo que lo encontré sobre las doce menos poco. Paula no me coge el teléfono porque, evidentemente, estarás durmiendo ya. Luego me entero que está viendo una peli, y me dice que no la llamé… Entonces llamo a Paco, mi médico homeópata, con el que tengo consulta mañana en Sevilla. Se lo cuento y me dice que vale, que si no puedo que no vaya, que a él le vendrá estupendo, y que ya me llama y concierta cita para la semana que viene. Le hablo del gato de nuevo, y me cuenta un cuento zen acerca de un gato y de un hombre que creía que nunca había hecho bien alguno, y se le recordó la vez que recogió a un gatino... Y lo dejo...
Tenía que contárselo a alguien, esa es la verdad, esto del gatito y de mi emoción.
Lo he dejado metido en la caja de cartón, luego de que se ha bebido la mitad del tazón de leche, con avidez, que veo que tenía hambre, y se ha acurrucado en un rincón de la caja. Le he metido un trozo de papel de seda que había por allí, todo arrugado, por si quiere arrebujarse en él, o echarse encima... Mañana ya le compro algo para que esté acostado o echado, y lo demás para que haga sus necesidades... Y si puedo voy al veterinario.
Lo he dejado en la cochera, en su caja metido, tapada... Y de momento no maúlla, no hace nada, por lo menos no lo oigo desde aquí arriba, y si hiciera algo, en el ruido de la noche, lo escucharía totalmente...
Bueno deseado estoy que llegue mañana para verlo y dejarlo libre por la casa, ver lo que hace, dónde va, cuál es su refugio y todo eso... Pienso qué le daré de comer, aparte de leche, porque creo que ya puede comer sólidos... Y todo lo suyo.
La verdad que esta noche pienso que hay alguien en esta casa: el gatito que dormirá, espero...
Es casi todo, Paula querida, le dije en mi mail (que luego he hecho entrada de este blog) que estoy muuuy emocionao,¡ea!, mucho... Pienso que es el destino con este gato. Y pienso ponerle un nombre, tal vez Bombo, o Bomby, o Pumby, o Micifuz o Zapirón, o alguno otro que me invente, y eso tiene que acontecer por casual, no por cálculo de dueño. O simplemente gato, o el gato, como en casa de mis padres, que nunca un gato llevó nombre, habiendo tantos y, como mucho, llevaba nombre de algún adjetivo: el blanco, la gata por antonomasia, el rabón, el grande, el negrito, el de angora, el esgumitao, palabra sonora de la parla llerenense, etc.
No tengo un gato, que conste, de un gato nadie nunca es propietario, por mucho que se empeñe, eso lo tengo claro, sino que un gato vive conmigo, que es bien distinto. No estoy solo.
Las fotos están regular, no permiten ver lo hermoso que es..., porque de noche todos los gatos son pardos, y esas fotos están hechas de noche cerrada.
Me lo he pensado mientras llegaba, con el gatino en el regazo de mi pecho, hasta una esquina, en la que, a la izquierda, tomo para mi casa, si me lo quedaba o no. Estaba en la encrucijada de cuatro calles, la Curtidores, la de las Tenerías (que el ayuntamiento de Llerena tan sabiamente asesorado ha eliminado su antiquísimo nombre popular o de la gente), la calleja del portillo de Frasco Vaca, que desemboca en la muralla donde estaba el portillo susodicho, y la calle Alcantarilla. Debo tirar para la dirección de la calleja de Frasco Vaca, para, a la derecha, desembocar en Torviscal, mi calle…
Mañana tenía que ir a Sevilla... Y esto del gato me ha emocionado tanto... Veo que la gata viene tras de mí, que estoy ya en la esquina de esas cuatro direcciones. La gata, la madre, llega hasta la esquina donde espero, y se entra en una casa abandonada, que tiene la puerta medio rota y con entradas para gatos, que da la calle Curtidores y hace esquina con la calle de las Tenerías. Desde dentro de esa casa maulla y llama al gatino. Éste le responde unas dos veces. Oigo a la gata como anda por la casa en ruinas, y se asoma a una ventana, luego a otra..., se sale y vuelve. Lo decido, me voy con el gatito para mi casa. La gata está de acuerdo y se olvidará de él en cuanto me lo lleve. Efectivamente, cuando comienzo el camino de mi casa la gata sale y se va en dirección contraria, calle Curtidores arriba, mirando de cuando en vez para atrás... Aprieto el paso con el gatito y llego a mi casa, sin dejar de mirar para atrás, por si la gata...
Llego a casa, busco leche, recién abierta pues la del frigo estará fría, y le echo de beber en un tazón para vinos blancos gallegos, lo primero que encuentro apropiado. No sabe, o está tan nervioso que no sabe o no acierta beber, o no quiere, que también lo estoy... Lo meto en una caja grande de cartón que me traigo de la cochera, y se acurruca en un rincón, luego lo agarro y le meto un poquito el morro en la leche, se relame y comienza a beber subido en la encimera de la cocina, a sorbos con lengüetazos, como hacen los gatos...
Luego le he hecho fotos, no muy allá, la verdad; pero la improvisación da eso. Estoy verdaderamente emocionado. Cojo el teléfono y llamo a Paula Deben ser como la una de la madrugada entre unas y otras cosas y creo que lo encontré sobre las doce menos poco. Paula no me coge el teléfono porque, evidentemente, estarás durmiendo ya. Luego me entero que está viendo una peli, y me dice que no la llamé… Entonces llamo a Paco, mi médico homeópata, con el que tengo consulta mañana en Sevilla. Se lo cuento y me dice que vale, que si no puedo que no vaya, que a él le vendrá estupendo, y que ya me llama y concierta cita para la semana que viene. Le hablo del gato de nuevo, y me cuenta un cuento zen acerca de un gato y de un hombre que creía que nunca había hecho bien alguno, y se le recordó la vez que recogió a un gatino... Y lo dejo...
Tenía que contárselo a alguien, esa es la verdad, esto del gatito y de mi emoción.
Lo he dejado metido en la caja de cartón, luego de que se ha bebido la mitad del tazón de leche, con avidez, que veo que tenía hambre, y se ha acurrucado en un rincón de la caja. Le he metido un trozo de papel de seda que había por allí, todo arrugado, por si quiere arrebujarse en él, o echarse encima... Mañana ya le compro algo para que esté acostado o echado, y lo demás para que haga sus necesidades... Y si puedo voy al veterinario.
Lo he dejado en la cochera, en su caja metido, tapada... Y de momento no maúlla, no hace nada, por lo menos no lo oigo desde aquí arriba, y si hiciera algo, en el ruido de la noche, lo escucharía totalmente...
Bueno deseado estoy que llegue mañana para verlo y dejarlo libre por la casa, ver lo que hace, dónde va, cuál es su refugio y todo eso... Pienso qué le daré de comer, aparte de leche, porque creo que ya puede comer sólidos... Y todo lo suyo.
La verdad que esta noche pienso que hay alguien en esta casa: el gatito que dormirá, espero...
Es casi todo, Paula querida, le dije en mi mail (que luego he hecho entrada de este blog) que estoy muuuy emocionao,¡ea!, mucho... Pienso que es el destino con este gato. Y pienso ponerle un nombre, tal vez Bombo, o Bomby, o Pumby, o Micifuz o Zapirón, o alguno otro que me invente, y eso tiene que acontecer por casual, no por cálculo de dueño. O simplemente gato, o el gato, como en casa de mis padres, que nunca un gato llevó nombre, habiendo tantos y, como mucho, llevaba nombre de algún adjetivo: el blanco, la gata por antonomasia, el rabón, el grande, el negrito, el de angora, el esgumitao, palabra sonora de la parla llerenense, etc.
No tengo un gato, que conste, de un gato nadie nunca es propietario, por mucho que se empeñe, eso lo tengo claro, sino que un gato vive conmigo, que es bien distinto. No estoy solo.
Las fotos están regular, no permiten ver lo hermoso que es..., porque de noche todos los gatos son pardos, y esas fotos están hechas de noche cerrada.
Mientras repaso esto pienso en Paula, la gata,
que ha venido muchas veces a este sitio y está,
(con Visnhu y Ganesh, gatos y pareja de hecho)
que me tiene que descubrir
sin prejuicios ni desconfianzas.
Como todo ser: soy el que soy;
pero soy y amo, aunque lo disimule y distraiga.
que ha venido muchas veces a este sitio y está,
(con Visnhu y Ganesh, gatos y pareja de hecho)
que me tiene que descubrir
sin prejuicios ni desconfianzas.
Como todo ser: soy el que soy;
pero soy y amo, aunque lo disimule y distraiga.
Hola Agustín. La historia del gatito me parece muy tierna, y más aún porque es gris atigresado, como uno que tuvimos en mi casa hace ya algún tiempo. Lo llamamos Misifú, hacía sus necesidades en la puerta de la casa de enfrente y desapareció un día sin dejar ni una carta de despedida. Suponemos que la vecina se encargó de su nueva vida. No obstante, lo que más me gusta de tu historia es comprobar que reciclas la basura.
ResponderEliminarBueno, me marcho a la biblioteca a estudiar porque las oposiciones ya asoman. Un saludo.
Agustín creo que es muy hermoso y valiente mostrar de forma tan natural y desnuda tu ternura...tu sentir aquí.Yo tuve una vez una gatita que se parecía mucho a este tu bebe-gato.Mi gata se llamaba Mayita,Siempre andaba por casa pero un día desapareció sin más.Quizás algún coche,algún veneno,alguna trampa...nunca supe.Maya era indomesticable
ResponderEliminaruna verdadera gata y dulce...preciosa,era preciosa...!Aunque ya ha pasado un tiempo siempre la recuerdo y es que se hacen querer .. ellos te acompañan.A veces te acompañan un corto tiempo a veces son muchos años en los que pasan muchísimas cosas....y ellos siempre ahí...a la vera...
Muchas gracias por tu relato y por compartirlo con todos los que estamos por aquí visitandote cada día.
Un beso
De parte de Zizou, Zazie, Becky y Crimson, mis gatas y gato, que has hecho más que bien dejando que el gato te adopte. Salud
ResponderEliminarQué gato más chiquetín ¡¡¡¡¡ La verdad, nunca imaginé que en tu blog ibas a escribir algo parecido a este post.
ResponderEliminarMe encanta.
Mi anciana vecina ama a sus gatos con locura y hace la vida imposible con su carácter y su egoísmo a todos los que tenemos que sufrir su falta de amor, su falta de respeto, su falta de educación. Odia a sus familiares, odia a la humanidad, nos odia a mi marido y a mí, que sólo le hicimos bien. Ya decidimos no tratarla y punto, no lo merece. Veo que pones abajo una foto de un gato amenazado por una pistola cuando hablas de ETA y referencias a Gara. ¿ETA es un gatito amenazado o un tigre que asesina sin piedad a quien no cumple sus designios? Ay, poeta, cuanta confusión existe en nuestro mundo. Cuantas visiones distintas de la misma realidad. Saludos de queridanónima.
ResponderEliminarMira, querida anónima, te voy a hablar meridiano y claro, como no tienen pinreles de hacerlo los tuyos, y cuando digo cojones me refiero a valor, hombría de bien e inteligencia y búsqueda de la verdad, y me refiero a todos los periodistas y todos los asalariados de la propaganda mentirosa del poder y del tinglado de este sistema de dominio, terror y mando. Quitémonos máscaras. Usted es del psoe y ya está dicho todo. No sólo porque le he leído afirmarlo de propio, sino por sus simples ideas, o simplistas, si digo con propiedad.
ResponderEliminarY la primera en la frente: si se aplican determinada doctrina jurídica para ilegalizar partidos, cerrar periódicos, publicaciones y la leche en plancha; seamos correctos y hágase a todos por igual, a los que se implican y usan en la violencia, por mínima que fuera. Y vayamos a los GAL y su vinculación con organizaciones, entidades, entornos, publicaciones, personas, intereses y etc., del pesoe, de su pesoe, e ilegalícense, señora suya, y aplíqueseles el mismo patrón que merecen por los mismos delitos que la llamada HB y su entorno: partidos, publicaciones, impuestos involucionarios, mamurria del poder establecido y del fascio capitalino, y etc., etc... A HB ya se lo aplican, y a otros claro. Esa la mayor y sin pormenores, que si los arrojo la cosa es para temblar: 28 asesinatos de gente totalmente inocente, secuestros de inocentes, el caso de Segundo Marey escalofriante, estremecedor… Lo de ETA no tapa eso, y es otro apartado…
Pero vayamos a mi vida: tu pesoe –usando a ETA, no sólo para ganar elecciones, por sus muertos rentables- me llamó terrorista, mataniños, ponebombas, etarra y to lo que le salió de los pinreles en el diario Hoy, el del partido, el 26 de agosto de 1996, en cartas al director. Lo denuncié ante lo que llaman administración de justicia, y pude contemplar, aterrorizado, que no servía de nada, incluso como un juez del partido lo archivaba ilegalmente sin darme notificación, como es preceptivo y de obligación legal…, ¿sigo? Porque no le hablo de los decenas de llamadas anónimas amenazando de muerte, por personas que leyeron, en toda España, la carta en el Hoy, y durante días se extendió que el Llerena había un etarra, oíga, mire, etc. Porque si ETA hace terror, mata y etc., que es a todas luces perverso, no vea entonces si no serán muchísimo peor aquellos que usan a ETA para demonizar, eliminar, ningunear, atrofiar a personas inocentes y honestas. Como fue mi caso. Porque está muy claro que nada tengo que ver con ETA ni con su llamado entorno de ninguna manera. Calcule entonces el uso del terror tan aventajado que hacen las gentes de su psoe en la vida cotidiana, en el día a día, lindamente, impunemente, porque de eso no habla ningún medio, eso no interesa, eso es uno de los medios de eliminar oposición y personas, tal vez algo mucho peor que quitar la vida, a las veces…
Mire, si tiene interés personal se pasa por mi casa y le muestro las patentes pruebas documentales de todo la movida de que le hablo. O me da una dirección y le envío fotocopias compulsadas, no importa el costo… Para que vea que mi disposición es incluso de buena voluntad con aquellos que tan mal me quieren.
Por favor, señora, está usted tratando con persona que ha sido víctima de anulación social y política, ensuciada, enmierdada por la gentuza de ETA y la antiETA que usa a ETA como mamurria para sus cosas de eliminar gente en estos andurriales llamados extremaduras, en donde la indigencia mental, la maldad consecuente, el miedo a lo distinto y distante, el terror a la ubicación de quienes elegimos libertad, frente a poder institucional, manejado por caciques ingnaros y votados, y el odio subsuguiente son sencillamente estremecedores. Incluso llegaron a decir que en Marinaleda y lugares afines había una confabulación con los etarras, porque en las elecciones al parlamento europeo se votó allá, más que en otros sitios, a la legal HB, allá por el 87, y desde entonces su pesoe martilleaba con que etarras y etarras, que algo queda... ¡Serán canallas! La demencia está servida y el olvido histérico está funcionando.
Señora mía, no está tratando con uno de estos panolis tiralevitas o burguesito asilvestrado, que protesta de boquilla, no. Tampoco con el pretencioso cultureta con estudios y carrera de trepa social, tampoco con el mediocre seguidor de ningún club de intereses de trinque político o similares, como son la mayoría de blogs al uso. Está tratando con persona seria, solvente intelectualmente, sincera, honesta a carta cabal… Y víctima del terror institucional, no sólo en eso del infundio de los sociatas; al secretario o mandamás de los cuales acudí, en buena fe, y los apoyó (los infundios) de forma soez y terrible, como es su uso de capo di capi. Sí, ese que se ha montado un despachito en la Junta hasta que las piche, sí ese que miente, chanchullea desde ese despacho al servicio del ínclito empresario Gallardo, como programa total y único, sí, a ese que está en continua campaña electorera, y ahora con despacho sólo para eso, y el partío, servido por cuatro serviles o administrativos, secretarias o chupaceites de pan llevar y a costa gratis total del erario público. Amén de otros servidores diversos o toda la institución a sus pies y manos, por la sencilla razón de que le delegaron, con todos los trucos y amaños que tiene, en elecciones diversas, los que lo hicieron, su servidumbre voluntaria. Que los más no lo hicieron, esa es la verdad, pero la colección de papeletas del partido pesoe era la mayor, a lo que dicen… ¿Habrá cosa más cutre y carca, fascista y caciquill que ese despachito del doctor Ibarra en la Jungla de Extremadura, dado a sí mismo para maquinar desde el estrellato caciquil el cotarro hasta la muerte y luego, si se pudiere?
Mire, de los bandos en conflicto, esto es, de ETA y los otros, me borra, por favor. Me declaro persona independiente, individualista, libre en la medida que lucho por mi libertad.
No amiga anó-nima, tu insidia, despiporrada, como es de uso en esa amorfa masa psoera, pagada tanto y adoctrinada tanto por tanto medio y fin, de asemejarme a tu puñetera vecina con gato, tiene una mala baba insolente de rancio corte felipista, ese jefe? de los GAL y otras gentes de oficios. Tu insidia está a la altura de toda insidia al uso psoero.
Ese gatito, al que aludes, soy yo, o uso la ilustración para decir eso, si miras al zapatero de atrás y su dedito inquisitorial y decisor de qué es legal y qué no, según el aire, tal para cual, lea bien, amiguita, lea bien: tales para cuales… Tanto ETA como los bandos en liza asesinan si piedad a quienes no cumplimos designios, sobre todo con insidias, injurias, porque de momento no se atreven a más, que no es poco…
De confusión nada de nada, amiga no-poeta o prosista, si lo prefiere. La confusion, la que pretende tu comento, hurgando en una llaga hecha por los de siempre, o llueve sobre mojado, en mi caso.
No tengo absolutamente nada personal contra ti, mi queridanónima; pero sí contra ese macropoder bipartidario que tapa tantas visiones de esa realidad, encenagándola con la ignorancia, el miedo y el odio, y así la total falta de voluntad de resolución de un conflicto que debería haberse superado hace años, y que por interés de control social general, político, intereses económicos diversos y complejos –mire la debacle que supondría para las empresas de seguridad la resolución, por ejemplo- y la propia dinámica política que gira en los útimos años sobre el mismo vórtice. Y yo no soy político, en su sentido popular y pachanguero (no hay otro), soy una persona que trata de vivir libre, y a la que ETA o los poderes contra los que se erige ETA le resultan adversos. Sencillamente eso, como casi todo quisque en el fondo.
MADRE MÍA, poeta, no pretendía ofenderle en esta medida, en verdad sólo quería expresarme, o quizá confiese que ofenderle un poco, porque ETA me duele y me duele cada vez que entiendo que el tema se trata con esa ambiguedad, y cada vez que lo leo, salto. Sea por un socialista o por uno de IU, que algunos hay que aún llaman a ETA de izquierdas. Ya sé de sobra cómo piensa usted del tema, aunque no sabía la hondura de sus experiencias, mis disculpas. Yo no he votado en las elecciones al PSOE sino a UPyD, precisamente por esta ambiguedad del PSOE con el nacionalismo, y el aprovechamiento del tema de ETA que me repugna en profundidad. En las regionales sí que puede haberme leído usted que quizá vote al PSOE pues no hallo algo mejor, pero tiempo al tiempo. En su día hasta voté a Suárez con el CDS, así que mire usted mi definición política. Sobre lo del PSOE con ETA, espero que el tiempo ponga a los dos donde merecen, quizá algún día sepamos toda la verdad. De todas formas, detecto algo ambiguo en sus comentarios sobre ETA que me pone muy nerviosa. Uno puede definirse a la vez en contra de ETA y del comportamiento del PSOE en este tema, como yo hago. No detecto este posicionamiento claramente en sus comentarios, así que no volveré a hablar del tema, descuide. No coincidimos.
ResponderEliminarY sí, también estoy cansada de personas como mi vecina que anteponen los animales a las personas, pero creo que no es su caso, aunque no le conozca. Supongo que interpreté mal la foto de la pistola, o relacioné indebidamente los dos gatos. Como usted me relaciona, intentando clasificarme, con el PSOE. Cosas de no conocerse. Saludos de la misma anónima.
Queridanónima: Tampoco veo nada posicionarse contra el terrorismo institucional y administrativo a usted, ni a la policía, ni a los jueces, ni a esa gente que se dice de izquierda, ni a los sindicatos... Y ese mata más y mejor que ETA.
ResponderEliminarNo, no va a leer en mí, ni ver ni oír la forma de hablar de ETA que me quieren imponer los responsables y beneficiarios de la misma. A mí quien me daña directamente es el terror y la tropeza de los d que mandan acá, esos sociatas, y de ellos hablo claro pues, y como quieren mi mal pues ¡leña! y lo que haga falta contra su caciquismo bestial, que el voto no me vale ni vale, soy demócrata de base no electoralista, que son cosas bien distintas. El nacionalismo español es el padre de los demás nacionalismos, y como hijos le salen rebeldes y contestarios: dos estupideces al encuentro y enfrentadas: nazionalismo "epañó" y nazionalismos histéricos babeantes. Señora yo estoy en libertario, en libre de dios, patria, rey, amo, votos o botas, bandas y banderas, propidedad privada de medios de producción, vulgo mercado y capital, familias, y estados, sea el que impone ahora o los por inventar..., salvo que la subsistencia me obligue a ello; pero laborando, petit as petit, su destrucción completa, racional y pacífica totá, no violenta totá, seño.
Atento, como caballero legitimista...
Querido Poeta:
ResponderEliminarPor tercera vez sé de esta historia y por tercera vez la veo distinta, tres historias en una, o puede que no sea una sino muchas; pero siempre veo que o gatiño es uno, bello y bueno, y que es cierto que no te pertenece, sino que le pertenecerás tú a él, y que no comparte la casa contigo, sino que te permitirá vivir en su casa, y que te dará mucho amor y compañía y cariño, incluso comprensión y captará tu estado de ánimo y será tu compañero inexorablemente, y que todo esto es incomparable con las personas, ni para bien ni para mal, ¡un gato es un gato! como aquello de sumar peras y manzanas; y merece, ya que permite a un poeta vivir en su casa y le deja cuidarle y mimarle, que éste le ponga un nombre requetebien elegido, uno, bello y bueno, que no es un gato cualquiera, que es "tu" gato.
La gata habría estado agazapada, agachada y al acecho si temiera por él; si estaba derecha, con el tronco recto y la cabeza alta es que os observaba, orgullosa del buen destino de su cachorrito y pendiente del final feliz. Y fue muy lista al ponerlo en tu camino. Como su criatura al no temerte ni escapar.
Sé de la emoción que embarga el primer contacto, sé de la emoción de los primeros momentos, de los primeros conocimientos, de los primeros días, de los primeros descubrimientos, y de los siguientes, y los siguientes, y los siguientes... Y de las ganas irrefrenables de contarlo y compartirlo.
Enhorabuena de nuevo a ambos.
Fauviña.
Pd.- Las fotos son preciosas.
¡Qué pequerrechiño era! (otro de los nombres de mi gato). Cómo me gustaría poder escribir así para haber contado la historia de mi gato paso a paso, cada uno de sus descubrimientos y nuevas habilidades, inventos, sustos, alegrías, novedades... y todo lo que aprendí y aprendo yo con él.
ResponderEliminarEnhorabuena y besos, todo mezclado.
Agustin, gracias por invitarme a leer esta entrada de tu blog que me ha emocionado hondamente. La ternura de algunos seres humanos se desarrolla por su amor a los animales y veo, con gran agrado, que es tu caso.
ResponderEliminarMe ha emocionado la actitud de la madre gata, que queria a la vez tener a su gato y a la vez quedarse libre de responsabilidades que (desgraciadamente) no podia atender.
Colaboro con una protectora y me encargo de los gatos, los adoro, y veo cada día el abandono, el maltrato, los insultos de los humanos a los animales y a los amantes de los animales. Pero también veo el amor que muchos humanos los tienes y su defensa de los mismos con uñas y dientes.
Enhorabuena por haber sabido ver las necesidades del gato y también te doy la enhorabuena por poder compartir su felina presencia, que te hará más feliz, tener mejor salud y mejor humor.
Son maravillosos y solo tienen cosas buenas que aportar.
Nunca seremos sus propietarios, son ellos los que nos dejan vivir en nuestras casas y dormir en su cama.
Y aunque todos los gatos son pardos, el tuyo ha salido precioso en las fotos, un poquito desnutrido, pero supongo que a día de hoy será un gato precioso y bien alimentado.
Tuvo mucha suerte.
Yo tengo 4 y pienso que soy una afortunada.
Decirle a la señora que escribio antes que no anteponemos (y me refiero a los amantes de los animales) la vida de los animales a las personas, lo que nos diferencia a los amantes de los animales es que nos importa la vida de los humanos y de los animales. Por igual. Yo nunca dejaria tirado a una persona ni a un animal que se encuentran heridos en el suelo, no me giro ni miro hacia otro lado. Quizá ella no pueda decir lo mismo. Con toda probabilidad su vecina esta harta de personas que la toman por loca por dedicar parte de su tiempo a alimentar a animales que no tienen la posibilidad de comer calentito todos los días y muestra su indiferencia hacia esos humanos. Y cuanta razón tiene de hacerlo.
Agustín, un placer. Seguiré visitandote.