Los seguidores bipartidarios salen contentos a la calle, a las avenidas, a las plazas, a las callejas y espacios públicos, en loor y gloria extrema, por haber ganado el monólogo (a dos) de las teles, ayer, en la perorata, pregón, prédica, sermón, homilía, arenga, alocución y charleta que mantuvieron sus clérigos principales, con un importante hombre del telelediario, de bigotillo acicalado y peluquín grisáceo. Si no lo creen, vean, vean y pásmense...
A partir de las diez de la noche, todos se arracimaban ante las teles de bares, chiringuitos populares, sedes episcopales y del trajín partidista, organizaciones, locales y familiares, kioscos de peladillas, pipas y caramelos, para ver en directo este encuentro para monologar, para mirarse el ombligo y escuchar las sabias argumentaciones de sus líderes, jefes, mandamases, obispos, cardenales, poderosos, presidentes, zapateros, rajetas, secretarios generales, generales propiamente dichos, adalides, cabos y sargentos, señoras de la limpieza, la limpieza de las señoras, dirigentes, superiores, regentes, rectores, patrones, amos, dueños de sus almas y sueldos, soberanos que emborrachan, tiranos amados y votados para sufrimiento del vecino, dictadores de donosas e inteligentes diatribas y soluciones, autócratas tecnócratas, la fea/flaca de la vicepresidenta del gobienno, patriarcas por aquello de la familia, y si diversa, más patriarca, caudillos, conductores y guías del pueblo atontado y perdido, autoridades, dominadores, gobernantes y cabezas visibles en esta tierra y la otra...
Incluso hubo amagos, en el partido retransmitido por las teles, a partir de las diez de la noche (repetimos), de pegarse de hostias, y fostiarse ambos dos amigos bipartidarios y compinches en esto del trinque de goles, digo botos o votos, que según.
Cuando terminó la cosa, el vulgo entusiasmado, a todos les dio por gritar: ¡¡¡Omos ganaoooooo!!!, como ganado ovino en trance de berrea berrenda y babeante, luego del debate, y tirados todos a la calle, a las avenidas, a las plazas, a las callejas y espacios públicos, en los papeles pal culo.
Se nos ha comunicado que todo el festorrio fue a costa del erario público, desde la a la zeta, en la sede de
En sus afanes pedagógicos, ante virtudes y vicios de los monologantes debatientes, algún medio ha elaborado un lindo informe que aconsejamos para la carcajada o el bostezo a lo largo de la campaña electorera. Sin pasarse, ¿ei?
Pos claro que han ganao ellos. Eso de siempre. Sin manos y sin votos. Que los malos y muchos siempre ganan en la realidad. Siempre lo vi, con otro folklore, con Franco y sus mesnadas, que ahora son de los bipartidarios, a una con su monólogo. Ya lo sabemos. Lo malo abunda y hiede.
La foto, que ilustra esta entrada, es una impronta, entre el gentío abundante y votador, que se tiró a la calle, a las avenidas, a las plazas, a las callejas y espacios públicos, a falta de otra cosa, de un seguidor de nuestro Zaparrajo bendito, el ganador de todos los debates, embates, combates y adquiridor de todos los votos de la democracia española y extranjera para siempre jamás. ¡Qué se atragante!
NOTA.- Esto es un borrador urgente para los ávidos lectores/as, hechos sus culos gaseosas en el seguimiento de todo lo que huele a debate y monólogo, por nombre cierto, de estos estafermos cuaresmales. En la entrega definitiva puliremos estilo, gracias y desgracias, erratas y palabras gruesas. Que mantendremos...
La pregunta curiosa, que sobrevolaba algunas mentes es si Rajoy o Zapatero son musulmanes, ¿o lo son los dos con todos los demás...?, que eso es lindo argumento contra ellos, como lo es contra Obama por parte de la cotorra y chismosa Clinton, o sus ayudantías en la cosa electoral y soplapollas varios.
Pues sí. Precisamente:
ResponderEliminarhttp://otrasopiniones.blogspot.com/
Qué grande, poeta!!!
ResponderEliminar