21 de enero de 2007

HETERODOXO

Son tiempos de memoria histórica. Nadie recuerda ni busca dónde está tu tumba, dónde reposan los huesos cuya carne, según dicen, fue privada de su piel cuándo aún contenía un ser vivo. Andrés Nin, doblemente olvidado, por el bando de los vencedores y de los vencidos. Es la suerte de los heterodoxos, ser doblemente vilipendiados, por aquellos que identifica como enemigos y por los aliados a los que critica. Décadas después lo dijo un cantautor francés, creo que Brassens: a los hombres no les gusta que uno tenga su propia fe. Pero, Andrés, los hay que seguimos preguntando dónde estás.

Grato esto, y sorprendente, por la doble o triple, o infinita moral, en uno de los medios más partidarios, partidista, parciales y particulares de la publicidad y propaganda política y mandona en España. El texto es de Emilio García García. Y he observado que esta mañana tenía catorce valoraciones de las más altas.

En fin, un testimonio medido para la galería.

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Hay algo que se llama libertad, y que debes ejercer libremente. Así que distingue bien entre las ideas, los sentimientos, las pasiones, la razones y similares. No son respetables; pero cuida, que detrás hay personas. Y las personas, "per se", es lo único que se respeta en este lugar. Muy agradecido y mucha salud. Que no te canse.