TRUENO, I

En la playa de Punta Umbría, mayo, 2000

Los lindos políticos y responsables de la cosa de Mandos, el el Poder Estatal, Capital y Bancario, aparte de Sindical Vertical y Mayoritario y Mediático, o su Propaganda y Comecocos, reconocen que el derecho al Negocio está por encima del derecho a la salud de la gente, pues no intervienen los crasos capitales y recursos de la Farmoindustria, que terminaría con muchas enfermedades y salvaría millones de vidas. Sabiamente utilizado. De esta manera queda demostrado que toda organización política y sindical, o afín, que no se pronuncie claramente al respecto, es una organización Terrorista y está actuando con crímenes contra la humanidad. Con la venia del ex-juez Garzón, por ejemplo, tan rápido al empurar a Gadafi y otras cositas de pan llevarse. Y si son muy votadas, esas organizaciones de Mandos Supremos, peor aún. A la chusma le mola en Terrorismo del Poder y el del Dinero. Lo anhelan con mucha baba. Lo estoy viendo desde siempre. Antes con Franco y luego con la democracia  franquista de transición, hasta el presente.

A los pobres los intoxican con películas, modas mentales, publicidades y agibílibus diversos y similares, cuyos títulos son terminantes y ajustados, a sus debidos anhelos, por ejemplo: No habrá paz para los malvados. Cuando la realidad de los que traman el mundo y sus cosas es atronadora a favor del mal y los malos y su paz. Así la gente votadora queda tranquila en sus casitas, gozando como los malos lo pagan, su mal, en la peli. En la realidad ese misma gente suele echar un cable a los malos, en las elecciones y en las obediencias debidas.

Ellas, algunas de ellas, cuando ven un hombre en su sitio, en verdad, belleza y bondad..., acostumbradas a hacerlos y verlos mequetrefes, no lo pueden soportar, no se lo aguantan, y tratan, por todos los medios, modos y maneras, de humillarlo, reducirlo a nada, vejarlo, ningunearlo a tope y hacerlo inexistente. Lo veo, lo siento, lo masco. Breve, leve, son.

continuará