Se vuelven locos de contento, el ano gaseosa de puro rejolguete y gustito, y bendicen a golpes de hisopazo la nueva era presidencialista, y agua bendita publicitaria, el festorrio del mando y tentetieso, la bendición del cotarro electorero, que refuerza sus molleras y sus bolsillos, malencarados de la crisis en los de abajo que tal apoyan, con la vesania de que todo ha de estar ordenado según ese principio del arriba y abajo, de la prelación rigurosa, del mito y rito ordenado, según sabias cabezas de sus popes, de esos que saben, mandan, ordenan, juzgan, se entremeten, imponen, obligan, disponen, dictan, fiscalizan, mangonean, conminan, decretan, establecen, intiman, estatuyen, instituyen, prescriben, preceptúan, advierten, encargan, encomiendan, deciden, piden, obligan, despachan, gobiernan, conducen, administran, rigen, presiden, tutelan, manejan, dictan y guían, entre otras muchas acciones similares y sinónimas que acostumbran ejecutar, con ese desparpajo del que sabe (García Calvo dixit), tamaña gente de presidencia. Eso sí, hoy auspiciados por sus servidores y seguidistas y con sus votos para machacar al otro. Como siempre ha hecho el mando desde que cierto mundo es cierto mundo inmundo, y se empeña en ser así de zafio y perverso de los más y contra todos. Que el dulcificado nombre del poder absoluto, totalitario y mental que asedia los cocos de los más, sobre todo en el ideario predicado por los medios, hoy se llama presidencialismo votado, eso desde luego. Para lo de siempre, por supuesto. Para mantener el tinglado de esa presencia presidencial, para que no se mueva un átomo de polvo, para que todo siga lo mismo de igual y para siempre, como una momia egipcia por siglos de siglas y consignas de que el mando es lo mejor y el presidente su profeta. Sobre todo el presidente modelo y cuño de todos los presidentes, y modelo y forma de toda gradación y escalafón social, y aun divino, cuando no casero, familiar, de comunidad de vecinos o de frailes, que el modelo, santo y seña, es el modo y moda del presidente yanqui recién estrenado y modernizado para los nuevos tiempos. Como si en eso de presi hubiera nuevos tiempos, y no fuera todo un tiempo muerto, tiempo hundidas sus fauces en lo oscuro del tiempo y la carquería conservadora en formol de la idea de presi...
La publicidad de esa gesta, de ese gesto, de esa epopeya, de ese cantar, de ese acto. La total ocupación de los medios del espectáculo propagandístico y la docencia, de trepas e indecentes amantes del mando y lo autoritario, se pone en marcha, sabiamente conducida por muchos expertos en todo esto, desde un sionista totalitario hasta los monaguillos de la información diversos y trincones, los simples periodistas y publicitarios, los fulanos del comecoco. Consiste en bendecir la idea, la cosa, el ideario más bien, el repertorio, la doctrina, enseñanza, teoría, sistema, opinión, escuela y creencia, todo en uno, del presidencialismo como un nuevo cesaropapismo de nuevo cuño y viejo tufo, en las atosigadas narices de los amañados borreguitos mayoritarios de los consumidores del Mercado Electoral, y del otro, de los que renuncian a su libertad en aras del mando ese y sus sinónimos, de los servidores voluntarios, de los fanáticos obedientes y talibanes presidenciales que en el mundo son.
Desde luego cuando uno escucha al tipo de la COPE diciendo que hay que desconfiar del poder, uno teme que lo identifiquen con tal lelo, que ahora tira de la desconfianza del poder y de poner al poder en cuarentena, y no hacerlo por sistema, como este que escribe y suscribe su pensamiento libertario.
Y desde el blog de un desconocido intelecto de provincia hasta el diario de más postín y solvente, corre que se las pela la noticia, y más que noticia, adoctrinamiento y pulpitazo: la autoridad absoluta del presidencialismo, esa esencia de toda existencia que nos dejan existir, la firmeza de que todo ha de estar ordenado en jerarquía al milímetro, y en una inexcusable pose de gradación que emana del de arriba y llega hasta los tuétanos del de abajo.
Y rápidos saltan los zascandiles menores que se nutren de tamaña mentira, a posicionarse al lado del caballo ganador, sobre todo de cara y culo a la galería y balconaje de los medios de adoctrinamiento y publicidad del espectáculo de los que disponen, ordenan y trincan pal Capital.
Porque esa es la victoria suprema de todo el asunto: la bendición, imposición, confirmación –una vez más hasta el hartazgo- de que la verdad impuesta es la única verdad y los presidentes son necesarios; pues basándose en ellos se dispone todo el asunto político y social, siempre acorde e imitativo del modelo (americano) y horma que hace todos los cestos por cientos.
Y aguantando el chaparrón de la linda progresía desmemoriada, tan puestas sus meninges sólo en una memoria, para olvido y daño de toda las otras. Menos mal que todo es y está claro como el agua, y no hay peor ciego que el que no quiere ver, y encima nos lleva al matadero.
Los veo casi a diario con el regodeo de llamar presidente al compi. Costumbre renovada de los sociatas y populetas en mando bipolar o bipartidario. Presidente pacá, presidente pallá. No el presidente, sino presidente en un singular inarticulado de admiración e idea de lo más y lo mejor, de lo santo y santificado, del alzado al púlpito y con manteo de los medios para imponer, decir urbe et orbi. En esas formas están sus principios y fines, su ser y estar.
El presidente es el presidente, y sus poderes y atribuciones son las mismas, nada importa que se llame Obama, Bush, Perico el de los Palotes o mismamente Zapatero o Rajoy, Franco o Idi Amín. La caca está en la idea y la función, y el mal y el asco.
NOTA BENE.- Es la única visión posible de la verdad dominante, para un libertario. O simplemente para alguien que ame -aunque sea mínimamente- la libertad y sus consecuencias. Todo lo cambian (en la superficie) para que nada cambie (en el fondo, si es que ya lo hay). Con esto, aviso a lectores pervertidos, no quiero decir que apoyo a Bush o lo demás, que me parece tan vomitivo y todo el mismo espectáculo.
Desde luego cuando uno escucha al tipo de la COPE diciendo que hay que desconfiar del poder, uno teme que lo identifiquen con tal lelo, que ahora tira de la desconfianza del poder y de poner al poder en cuarentena, y no hacerlo por sistema, como este que escribe y suscribe su pensamiento libertario.
Y desde el blog de un desconocido intelecto de provincia hasta el diario de más postín y solvente, corre que se las pela la noticia, y más que noticia, adoctrinamiento y pulpitazo: la autoridad absoluta del presidencialismo, esa esencia de toda existencia que nos dejan existir, la firmeza de que todo ha de estar ordenado en jerarquía al milímetro, y en una inexcusable pose de gradación que emana del de arriba y llega hasta los tuétanos del de abajo.
Y rápidos saltan los zascandiles menores que se nutren de tamaña mentira, a posicionarse al lado del caballo ganador, sobre todo de cara y culo a la galería y balconaje de los medios de adoctrinamiento y publicidad del espectáculo de los que disponen, ordenan y trincan pal Capital.
Porque esa es la victoria suprema de todo el asunto: la bendición, imposición, confirmación –una vez más hasta el hartazgo- de que la verdad impuesta es la única verdad y los presidentes son necesarios; pues basándose en ellos se dispone todo el asunto político y social, siempre acorde e imitativo del modelo (americano) y horma que hace todos los cestos por cientos.
Y aguantando el chaparrón de la linda progresía desmemoriada, tan puestas sus meninges sólo en una memoria, para olvido y daño de toda las otras. Menos mal que todo es y está claro como el agua, y no hay peor ciego que el que no quiere ver, y encima nos lleva al matadero.
Los veo casi a diario con el regodeo de llamar presidente al compi. Costumbre renovada de los sociatas y populetas en mando bipolar o bipartidario. Presidente pacá, presidente pallá. No el presidente, sino presidente en un singular inarticulado de admiración e idea de lo más y lo mejor, de lo santo y santificado, del alzado al púlpito y con manteo de los medios para imponer, decir urbe et orbi. En esas formas están sus principios y fines, su ser y estar.
El presidente es el presidente, y sus poderes y atribuciones son las mismas, nada importa que se llame Obama, Bush, Perico el de los Palotes o mismamente Zapatero o Rajoy, Franco o Idi Amín. La caca está en la idea y la función, y el mal y el asco.
NOTA BENE.- Es la única visión posible de la verdad dominante, para un libertario. O simplemente para alguien que ame -aunque sea mínimamente- la libertad y sus consecuencias. Todo lo cambian (en la superficie) para que nada cambie (en el fondo, si es que ya lo hay). Con esto, aviso a lectores pervertidos, no quiero decir que apoyo a Bush o lo demás, que me parece tan vomitivo y todo el mismo espectáculo.
Después de leerte hay que coger aire y suspirar.
ResponderEliminarEs lo más interesante (e inteligente) que he leído sobre el coñazo americano.
Saludos!
Pues es verdad...
ResponderEliminarMe ha recordado al tipo que le preguntan si prefiere morir ahogado o quemado... piensa que tiene libertad para elegir, pero... ¡si, al menos por ahora, no quiere morir!
Muy buen blog, le felicito. Tal vez le interese EL ARTE DE LA VENTAJA, libro virtual para descargar en
ResponderEliminarhttp://www.personal.able.es/cm.perez/Extracto_de_EL_ARTE_DE_LA_VENTAJA.pdf
Manual práctico para sobrevivir con astucia en el mundo. Lo que te han contado no es suficiente para triunfar:
los conocimientos de este libro se aplican de forma inmediata con resultados excelentes.
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MIRA, PARA ENRIQUECER TU EXPOSICIÓN DESLUMBRANTE, Y LO DIGO SIN COÑA
ResponderEliminarFede de los Ríos
Querer es poder, sí, si puedes y quieres
Los del PSOE dicen ser como Obama; los del PP no iban a ser menos. La política de ERC es una mezcla de las políticas de Tony Blair y de Obama, según ha declarado uno de sus dirigentes. CiU es Obama con barretina, al fin y al cabo la virgen de Monserrat també es moreneta
Obama ganó, un negro en la Casa Blanca. ¡Qué bonito! Y todos se reivindican obamistas. Sarkozy se muestra esperanzado con la elección y Berlusconi envidia su bronceado; por estos lares, Sofía está encantada porque un negro pueda llegar tan alto, desconoce la pobre que, incluido Baltasar, la historia (la africana, eso sí) está plagada de reyes negros con idéntica legitimación democrática. También está el famoso King África
Los del PSOE dicen ser como Obama; los del PP no iban a ser menos. La política de ERC es una mezcla de las políticas de Tony Blair y de Obama, según ha declarado uno de sus dirigentes. CiU es Obama con barretina, al fin y al cabo la virgen de Monserrat també es moreneta. UPN investiga si San Fermín, morenico igualmente, no procedía de Kenia.
El lehendakari de todos los vascos y las vascas afirma, sin empacho, que el lema de la campaña electoral de Barak Obama «Yes we can» (Sí, podemos) fue inventado por la sociedad vasca, a la que ha atribuido la paternidad del dicho «querer es poder».
Debe saber el lehendakari que «el querer y no poder es más antiguo que el peer», otro dicho que describe con más exactitud la situación en que nos encontramos gracias a las etéreas promesas de un gobierno que se ha caracterizado por vender humo. La última de sus humaradas o humoradas, que tanto da, fue la del famoso referéndum, que pasó a plebiscito que se convirtió en consulta para acabar haciendo el gamba con unos cartoncitos y unos paraguas de colores un fin de semana en el campo. En Nafarroa ejerciendo de augures auspiciaron el cambio de la mano del PSOE consiguiendo un rotundo éxito.
Lo que caracteriza a ustedes y a los de su calaña es la querencia del Poder, es decir la de las poltronas aunque para ello tengan que oficiar de monaguillos de Madrid. Prometen cosas a sabiendas de que no las cumplirán porque ni siquiera las desean. En eso sí se parecen ustedes a Obama, un negro suficientemente blanqueado para ocupar el despacho oval, como lo fueron Collin Powell y Condoleezza Rice.
La vacuidad de su discurso después del triunfo electoral es aterradora, por eso le debe gustar tanto al lehendakari. Nada dice al respecto el alopécico Anasagasti, martillo de populistas latinoamericanos, claro que la demagogia con acento de Illinois debe de sonar a música celestial en los oídos de Iñaki. Sobre todo el final, «que Dios bendiga a los Estados Unidos de América».
Imagino a iraníes e iraquíes arrodillados mirando a la Meca, flexión viene y flexión va, encomendándose como locos a Allah. Falta les va a hacer.
El amigo americano, aunque moreno, está puesto por los grandes trust y oligopolios para que intente resolver la crisis. En la economía capitalista, globalizada o no, los beneficios de unos son la ruina de otros; el capital no quiere fronteras quiere mercados. Pronto nos enteraremos, a la manera de Georgie Dann, qué es lo que quiere el negro y experimentaremos qué es lo que puede el negro, como nos enteramos de la desidia impotente de Ibarretxe y su gobierno siempre un pasito pa'lante, dos pasitos pa'tras.
http://www.gara.net/paperezkoa/20081109/105715/es/Querer-es-poder-si-si-puedes-quieres