BANCA MALA

Pa mí este mameluko, babeluko, o peluko, chafao (sic) a la antigua, carcundiós (sic) de la cosa trapacera del Mando en los Madriles, esa aldea manchega de la que tanto mal viene, ta sonao o es la falta del inteligencia suprema, esto es, el Mal por antonomasia y vivo. O sea, la falta de cacumen, y por ende de bondad, que decía san Isidoro de Sevilla en sus elucubraciones ontológicas. Y en esos Madriles es que residen la Banca, los Especuladores, los Mercados, el Trinconeo, la Muerte, en definitiva. Este Don rajETA, como lo llamo desde hoy, o vulgo Rajoyi, va y nos dice, desde el espectáculo y el teatro europeo de Marsella..., va y nos dice -repito- que hay que crear un Banco Malo, (o será ¿blanco malo, si lo parla a un gringo Mandamás?... Si fuera vinatero lo entendería, para hacer lucrativo negocio en esta época de Crisis y Navidad).

No sé si se refiere al banco del parque o del paseo, al banco del carpintero o al duro banco del poema ese de Espronceda o Espontela marinera, en la canción del pirata, rata o banquero, ¿o era aquel soneto de Góngora inmenso que nos decía?:

Amarrado el duro banco

de una galera turquesca

ambas manos en el remo

y ambos ojos en la tierra.

Un forzado de Dragut...

(se puede leer completo, este preciso y veraz poema, en.., si pinchas supra...)

Y se refiere o difiere o infiere, con esto de la banca mala (¿tal vez enferma de gripe aviar?) de la Crisis y de los pobres; pero me da que se refiere al de la Pasta y el Negocio, el Parné y sus degollinas, a la Monea y el Color y sus pastoreos o pasteleos, la Guita y lo Verde, los Fondos y Tesoros, el Peculio y Caudal, al Metálico y Pecunio cortantes, los Cuartos y aun Quintos, el y Oro del Loro o Moro, la Plata y Tesoro, la Cosa y Fortuna Enajenada, la Calderilla y el Cambio con las necesidades de la gente. A lo que sirve y obedece (todo eso mayusculizado), vamos, para machacarnos a todos. Y a lo que sirve todo el aparato del Estado y sus cuévanos, su Policía y su OTAN viva.

Y me pregunto sobre la aviesa intención y creencia de crear o creer en la banca mala (sea enferma o moral, u ontológica incluso), de fondo, al exponer que pudiera haber bancos buenos..., que ese sentido (estúpido o de creer estúpida la inteligencia, formada e informada del común, sobre to de sus votadores) tiene la burlesca e hiriente prédica, absolutamante de descerraje terrorista fino, del barbián gobernante in pectore. Y la Linda Progresía cae en su trampa como en todas las de la Derechona que lo soporta: Y digo toito el PP$OE en pleno, más alrededores y mascas del sindicalismo vertical mayoritario, con los apoyos del empresariado, la Trilateral y del Mangante Poder Yanqui, sin objetar nada.

Si miedo me daba Zapatiestas o vulgo ZetaPé. Más me atiza este sucesor, vía voto tonto y tinto en sangre, del personal que lo hace, como bambolea y grita aquello de campeones campeones campeones en las misas masivas del futboleo chusmero y chusquero cotidiano. Que a mí me suena a capeones capeones capeones, que deriva en capones capones capones, por la capa que se dan ellos mismos y la esterildad del acto. Con Ley Electorera Trucada y Amañada, claro, y sufragamientos del festorrio de esa Banca Mala Siempre (sic). Don Rajoy, si me está escuchando, que no hace falta que usted la cree, que ya existe de siempre, basta con que la crea y la vaya creyendo para mal de todos, y el bien de la misma y sus favorecidos criminales.

Lo mismo se refiere a sus paisanos de Siniestro Total, que es lo que pretende y haciendo siempre patria y aun matria materna.

Lo de miedo es retórica pura. Pues ante estos y esto debe erigirse inteligencia, valentía y amor. Es lo único que no me falla. Eso, que a ellos les falta.