FIDELIDAD O MUERTE

Lo de fidelidad o muerte no se refiere, en este caso, a la elección entre dos consumos, no. Me refiero a que si no hay fidelidad hay muerte, se reducen las personas a cosas, usos, consumos, números, votos, muertos en fin, y al cabo. Muertos para todo menos para los contables macánicos del cuenteo, el banqueo, el voteo, el consumeo y todo eso lindo, muy lindo.

Sentir siquiera el aire de lo que se llama fidelidad es casi imposible, en sociedades como estas, en que morimos, que instiga que todo sea mercaduría, producto, oferta, género, existencias, efectos, de usar y tirar..., compulsivamente. Ir de este al otro, del esto a lo otro buscando un consuelo que jamás hallaremos, porque jamás echamos raíces, jamás somos sino volátiles muñecos que pasan y pasan, que se destrozan a ellos mismos en ese pasar y pasar, rodar y rodar, que decía la copla arriera en otro sentido más noble, de mano en mano, de uso en uso, de uno en otro, de cama en cama, de poltrona en poltrona, de bolsillo en bolsillo, de alma en alma, de otra en una, de una en nada, de uno en cero.

Es el primer daño del Poder del Dinero, el Capital, el Banco, sus Mercados, sus Garitos Prostibularios y sus superficies de arrebatos, en donde sus Políticos, que los sirven, hacen de trajineros, chulos y macarras.

Así la infidelidad de consumo, entre personas, en lo afectivo, amoroso, íntimo, se reduce a eso: Mercado, Capital, Banco y rule en las timbas, antros, leoneras, cubiles, burdeles, tascas, matutes, boliches y chirlatas de vario precio y múltiples covachas de venta, ofertones, trucos y truques enrayuelados..., y nada ni nadie es fiel a nada ni a nadie..., para que to dios esté desestabilizado emocionalmente y así campar ellos a su bola (Capital, Mercados, Bancos, Políticos, Poder y Amos...), y que el Poder Total sea lo que es para los buenos, los de abajo, los que se pudren de fidelidad. Y los de abajo estemos como estamos. Y todo Crisis.

Y pienso esto porque tengo más altas miras que eso de la famosa Crisis, provocada por el exceso promiscuo de consumos descocados, alocados, enloquecidos que todo lo ha llevado en el turbión del Capital y del Valor ünico (sic, con dos ¨, como bipolar) del Dinero. Que esa Crisis viene por otros derroteros y lugares hace tiempo. Que esa, con ser mala, hace todo el Mal en el alma, el espíritu y es Muerte.

Por tanto una fidelidad es poner patasarriba todo este cúmulo de valores imperantes del Mercado, poner fuera de juego los Capitales, Bancos, Dineros y sus reducciones de todo a sus valores. Y sobre todo la vida íntima y sus amores, aguas, pasiones... Es la revolución de fondo a toda marcha. La que todos temen, y está ahí, al alcance de cualquiera.

Ser fiel es ser revolucionario desde el fondo del bien, la bondad y la belleza, contra las ignorancias, miedos y odios del Poder y del Capital, del Mercado y sus Valores, por mucho que los voten los Políticos y sus millones de votambres. Lo demás, mecadurías y usos descocados, producidos por el Capital en las entrañas de los monigotes. Que tal vez sean felices en ese revoltijo consumista. Pero felicidad de pega y marketing, por supuesto, la de la infiel publicidad, que ora predica a este, ora al otro. Y lo mismo nos desea, que seamos, en su forma., versañtil e infieles a nosotros mismos. Pura mercancía descocada.