ANGUITA

De la jocunda morralla jactanciosa, de los políticos profesionales, aupados por sus Votambres pertinentes, es la sociata la que con más virulencia, fulgor y enjundia, de mala baba y soberbia engreída, ha atacado lo que Anguita representa. Y quien dice Anguita dice la razón, la libertad, la bondad, la verdad y la belleza, expresándose en cómo se han de resolver los asuntos públicos y sociales, para el buen funcionamiento de la vida entre los seres humanos. Aquí y ahora. No es que uno adore a Anguita, como un líder más del estrellato canalla de la política profesional. Pues ese estrellato, los FeliponDIOS González, los Aznares, los Guerras, los Ibarras, los Solanas, los..., los..., exclusivamente se ha dedicado a servir al Poder Económico (Bancos, Mercados, Especuladores, Ricos, Gentes de Arriba...), desde sus cargos de manijeros del Cotarro. Bien es verdad que electos del personal abajado y que paga sus platos, la Votambre. Votambres surgidas del frío de las especulaciones y trucos y amaños del electoralismo y sus estafas y maquinarias electoreras y de mercados varios... No tengo ni líderes ni veo en las personas dones especiales por los que se les deba adorar.

Verdad ha sido aquello de que se conoce bien cuando surge un genio porque todos los necios se conjuran contra él. Creo que la idea es de Jonathan Swift. Y no es que Anguita sea un genio, no. Pero si es verdad que los necios se conjuran contra él. Por lo general los necios se conjuran contra todo lo que trata de funcionar de forma saludable y razonable para todos. Pues este sistema circense de vida social se monta sobre el mero espectáculo, que crea ignorancias, miedos y odios, como los magmas en los que la Canalla, encaramada Arribita del to, hace sus apaños.

Verdad fue aquel vergonzante pasado en el que los sociatas acérrimos y sus descastados arremetían contra Julio Anguita. Jamás escuché nada a alguno sobre sus ideas y lo que exponía. Todo eran coces, infamias, injurias, desdeños, insultos. Sobre todo aquello de la pinza. Salido de ellos, de los sociatas, era no sólo bellaquería mayor sino de mala baba. El bulo de que Anguita se pactaba con el pp para ir contra la psoe. Algo imposible. Pero los Falsimedios son así de poderosos: de tanto repetir aquella zafia mentira, a instancias del Amo y Manijeros, la hicieron verdad en los cocos demasiados de sus Votambres. ¡Qué no es na lo del cuarto poder! Pero si analizamos despacito, se observarán varias ideas en eso. Una, no por menos bellaca, es la absoluta erección de la psoe en mandar y señalar quién debe pactar o no debe pactar con quien le dé la gana, lo que sea o fuere. En aras en erigirse en la quintaesencia de la llamada izquierda. Y ese demencial mensaje era lo escondido en esa infamia de la pinza pp/iu. O sea, la marca psoe, algo  que utiliza la derecha real para defender sus dineros y privilegios, se elevaba en el santo oficio de la inquisición, para decidir con quién sí o con quién no podía pactar iu o Anguita, o quien sea. La soberbia, la puta soberbia de los sociatas, que los mata a la razón y la inteligencia, y les hace ganar votos de lo peor del cuerpo social y sus cloacas.

Porque esa gente soberbia y cimarrona, lo peor del todo social y humano sobre la piel de toro, pactó ya con Franco y sus enviados. Compró la marca psoe y con capital internacional, con oscuros intereses, se estableció como el Mando Supremo de la izquierda. Pactó y pasteleó siempre todo con la otra derecha de siempre. Desde la transición o transacción del país, de un estado de cosas en el Poder de Arriba, a otro, hasta la del famoso Pacto Antiterrorista, sólo con el pp. Maravilloso instrumento para atizar contra todos los demás. Y sobre todo contra los rojos terroristas, que eran todos los rojos. Y acabamos con el Gran Pacto de Reforma Constitucional, hace poco más de un añito, que machaca a todos los de abajo. 

Con esas mimbres, ¿qué pueden hablar y a quiénes los sociatas de pactos, pinzas, actos...? Desde luego a sus envilecidos votantes, millones de alienados y estafados y contentos. Y es a esos a los que sale al encuentro la estrategia de movimientos que surgen, una vez más, por el iluminado Anguita. De antemano casi fracasados y vencidos como don Quijote y la verdad, la bondad y la belleza, por esos nigromantes de los Falsimedios, primero, y por los políticos profesionales conchabados en hacer el mal a los de abajo. 

Y destaco -de los argumentos de Anguita- su verdad surgida del movimiento del 15M: los de abajo contra los de arriba. Y de ese discurrir debe o puede salir algo limpio. Lo que me dudo es de si hay gente disponible para esa lucha, si realmente esa gente, que ha visto todo esto, que ve a diario como triscan, roban, estafan, engañan, chalanean los políticos profesionales del pp$oe y sus similares y sindicatos y organizaciones diversas, y lo consiente aguanta y afila el voto para mantenerlos más en el daño supremo que hacen... No es que dude del proyecto que presenta Anguita, no. Dudo si en España hay suficiente gente para ponerlo en pie, para levantarlo y afianzarlo. En una España llena de ignorancias, miedos y odios de todos esos daños de festorrios de los pperros y sociatas, en estos treinta y tantos años, por poner un límite, que viene del fondo del saco de lo que llaman Historia..., que nos han llevado a esta situación. Dudo de eso. Y me avergüenzo de que sea alguien ya anciano quien dé la voz de alto, de reunión a la gente, para que se una y dinamice un frente contra tanta iniquidad de los de Arriba. Pero dudo de los de abajo, dudo de que se rebelen, siquiera eso, la rebeldía contra esos manijeros que mantienen todo callado. Este tiempo algaranero pero de silencio atroz de lo real que mata. Mucho más que el tiempo de silencio de la famosa novela.