Tres años antes de eso que han dado en llamar el hallazgo de las momias o muertos de Llerena, uno vivía en Toledo. O sea, fue por 1976 cuando en una de las iglesias toledanas, creo que se llamaba de san Pablo, y mientras se hacían obras en la misma, se encontraron los típicos restos de antiguos enterramientos que tuvieron lugar en aquel lugar sacro. Y que con el tiempo encerraron en algún sitio como fosa común u osario. Al uso de los cementerios hasta el siglo XIX, que dedicaban espacio en derredor de las iglesias para dar sepultura a los muertos. Lo de los cementerios apartados de la población es del siglo XX en España. Pero como en las escuelas NO se enseña historia de verdad, o qué fue del pasado y sus usos y costumbres, sino to eso de la batalla, la memoria, la mamurria y tontunas, pos los españolistos andan así como mu necios. Coincidió, también, que uno andaba leyendo ese ensayo esencial de José María Blanco White llamado Cartas de España, y además en un apartado donde White habla de la forma como se enterraban/colocaban los restos de cementarios en iglesias sevillanas. O sea, uno, como hoy, se cultivaba leyendo, estudiando, reflexionando... Así que, al leer esto, ya andará la patulea de llerenises que me chupa ruedas indagando para hacer memeces, bien editoriales y peliculeras y el ridículo, como hasta la fecha, con el NODO cutre y pueblerino y soplapollipeando a gentes contra mi persona, para usarlas en sus trepas culturetas... Con lo cual me hacen un favor grande...
Así que cuando se encontraron los muertos o momias en Llerena, en la rampa de subida al alminar de la torre de la Granada, o alrededores, instalaciones usadas como osarios, principalmente, uno tenía ya el culo pelao y estaba de vuelta. Aún siendo muy jovencito. No en vano, y ante la baraúnda de necios y enterados, fui asesor de medios extranjeros importantes que, al arrimo de aquel boom del verano, se acercaba a Llerena. Los acreditados arrimadillos al PPoder y PPasta aún no medraban, como usuarios/sicarios del todo y totalidad de la Verdad Absoluta en Llerena, desde el bando o banda municipal de mangoneos totales de la llamada cultura. Había libertad o se podía ser libres. Hoy eso es impensable pues el monopolio totalitario, como ni pensaba Franco, de lo que llaman cultura es absoluto, natural y obligado... Y en Llerena y Extremadura hacer cultura, creación y vida de todo eso desde la libertad personal única es una cosa imposible. Aquí los pprogres y los sicarios y gentuzas ultras han conseguido que la verdad totalitaria sobre eso la tengan los que son más votambreados. Han conseguido el fascismo más sucio y el caciquismo más atroz que haber puede... Y encima se molestarán los aludidos. Un día voy a a soltar pelos y señales del suceso tan normal que parece que ocurre como algo honesto y es todo lo contrario...
Acumulé mucho material, documental y de todo tipo, para demostrar lo lerdos, torpes, catetos, palurdos, brutos, ignorantes, llenos de miedos y lugares comunes y vulgares y esos odios de los tontos, que tanto dañan, de este magma que llaman España, y conocí los intríngulis pardillos, botarates, brutotes, zotes de Extremadura y la mayor parte de su grey sabijonda de entonces, que ha empeorado con el ahora mucho más, pues es titulada y gana pasta y tiene poder, oye. Se saben peer y repican en botija pa que resuene...
No obstante vi en todo aquello un suceso para estudiar la condición humana, el ser humano en un lugar y tiempo dados, en un punto y una hora. En una conversación larga, que tuve sobre esto, con Cela, en la Mallorca de 1985, donde terminé viviendo un año, y lo destacamos y me dio pautas maravillosas para escribir -incluso- una novela burlesca, mortal, un juego o bailoteo entre la vida y la muerte: Danza macarrónica llamé al borrador y ya adelanté algo en dos números de aquella revista que con el tiempo gana, y eso que la hacíamos en ciclostil, tipo marginal y andergraun, llamada Miscelánea, y de la que me he encontrado algunos ejemplares, que se venden, como oro en paño, entre los bibliotecarios, coleccionistas, libreros de viejo en todo el mundo, oye. Incluso una libreria de viejo de Manchester la pule por 390 euros ejemplar... NO en vano el sabio Hernández Gil hizo un buen estudio de la misma en el primer congreso de escritores extremeños que se tiene memoria, por la Cáceres de 1979... Y Cela me animó, paternal, y de cachondeo me dijo algo relativo a que le quitara el parloteo de Reverte Metamorfoseado, tan envarado, y la hiciera más ligera, lúdica y popular, en su noble sentido... Tal vez -y sin tal vez- tenga todo lo que se vertió sobre el evento de las momias o muertos de Llerena en el universo mundo. Y no estaría mal hacer caso al premio Nobel amigo y crear unos capítulos iniciales sobre la larga charla que mantuve con él, años después, sobre el suceso, como prólogo de novela en el Mediterráneo mallorquí... Enlazar con otra que pillé con Melquíades Álvarez, un docto profesor de literatura mística de la UNEX, aunque pasaba por profe de historias del arte, con quien -a veces- me trababa en largas conversaciones sobre el tenor de la ideología de los alumbrados. Y lo mismo esa fue la sapiencia que se me pegó para que mi amigo Manuel Pecellín Lancharro diga, por alguna parte, que soy un buen especialista -pa él el mejor- en el asunto, lo mismo el mejor puesto... Incluso lo que publiqué en una revista abertzale radical o cuasi etarra, traducido al euzkera. Luego reconozco que, dos años después, el diaro EGIN y la revista nueva y modélica del mundo revolucionario vasco, Punto y Hora de Euzkal Herria, me publicaron varios ensayos sobre ese suceso, con bastante atención general de los lectores de diarios, como no la hay en el sur, ni en los madriles... Llegué a tener como tres mil cartas sobre el tema en la revista, y en el diario casi un mes de cartas al director, bien con puntualizaciones sobre mis reflexiones sobre la muerte y la suerte, la historia real y la vida, las cuchipandas de los historiadores e historigrafiados o perezrevertes de mierda, y los dos artículos del diario Le Matin, diario franchute de la tarde, cuyo enviado especial me fichó enseguida como persona espabilá y muy diferente al común cateteo de aquel entonces y este ahora presente. Y luego más. En estos casi 36 años he llegado a verme hasta cuatro veces con él e incluso me tradujo varios trabajos literarios, que publiqué en revistas francesas. Hace tiempo que no sé de él...
Pero lo curioso es que aquello fue una noticia basura. La típica noticia que los medios usan con los fines de desviar la mirada y las intenciones, en un tiempo muerto político, de ajustes o de verano. Bien lo dice el amigo Luis Peña, sin duda el que mejor pone eso, en un reciente reportaje rememorativo que no aporta nada, ni analiza nada ni na de na... No obstante la españa de aquel verano quedó sorprendidamente retratada como la españa eterna, sin principio ni fin, en lo tocante a su saber, esencias, valores, sabores e idiosincrasias esenciales, que luego fueron derramándose a lo largo del trajineo de estos últimos cuarenta y pico años de postransición. Si es que la transición tuvo lugar... Y de dónde a cuándo, o viceversa.
Ya se sabe que pa marear la perdiz, pa entretener a la gente los falsimedios usan el amor o la muerte, en sus diversas gradaciones, con alevosía, malaleche o candidez supuestas. Y entonces los asesores del Régimen de PPasta y PPoder tardofranquistas optaron por la muerte, pues tocaba y debía tocar con Franco muerto como cuatro años y una descomposición social, ventral, política, económica y total que se iba perfilando en la construcción o reconstricción o readaptación del régimen en algo que llamaban ya democracia, con su constitución y todo, recién estrenada y surgida de ultratumba. Como una momia, lo mismo trajinada, torturada, encerrada, castigada, oculta, surgida por reformas, aparecidas...
Así que teniendo todo ese material, disponiendo de mi experiencia personal y mi memoria y tratos, incluso habiendo sido un avezado escrutador de momias y muertos, con mi amigo el Cipri, bien puedo preparar un trabajito para las jornadas de historia en Llerena, otro para la revista de fiestas de Llerena y una amplia publicación en formato de ensayo libre, sobre lo que los españoles no acostumbran pensar ni reflexionar, sino embestirse entre ellos, como toritos bravos, o bien escribir ocurrencias y memeces subvencionadas que no aportan nada, pues el personal que pudiera estar interesado no existe.
Ya dije que el tema esencial del aparato y suceso fue la muerte. El fondo de todo ello. Y sobre la muerte los españoles de ahora no saben mucho ni quieren saber, como tampoco de la vida... Andan ahí como entre dos aguas sucias sin mojarse en ninguna.
Sobre todo es necesario abordar un estudio metódico, racional, exacto, completo, multidisciplinar y esencial sobre ese suceso que menciono y todo lo que le rodeó, sus concomitancias son y dicen, a veces y sin veces, más de lo que pretenden decir los que lo usan. Y todos los que lo han abordado lo han hecho de forma tan lerda, falsaria, interesada, instrumentalizadora, faltos de toda formación mínima para ello, propagandistas de la progresía o cuchipandas de las ciencias ocultas y caras duras con molleras sucias a los que el saber importa poco, sin valores ni respetos. O sea, como todo en este país en que se cree que el saber es algo por cojones, algo de creencias, opiniones y nada de criterios, razones, datos, pelos y señales. Y sobre to verdad, bondad y hermosura aplicadas con inteligencias.
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