19 de mayo de 2007

EL FUNCIONARIO CULTURAL DEL RÉGIMEN

El señor funcionario cultural se ocultaba, aquella mañana, tras un libro de un amigote que leía -hoy por tí, mañana por mí- para hacerle los parabienes en las covachuelas donde expendía sus turiferarios escritos, a fin de conseguir esa pátina de fama y abolengo que tanto engaña.
El señor funcionario cultural era poeta, malo: pero poeta, al fin y a la postre. Claro que poeta de verso libre. O sea, ese verso que se deja llevar por la música de un silbido cualquiera, en vez de preferir una clara sinfonía melodiosa de claros instrumentos, o la claridad musical del trueno o el agua. El silbido era algo más personal, íntimo, lírico, tal vez líquido, sensible, de uno, propio, personal...
Era mal poeta; pero premiado. Muy premiado el señor funcionario cultural, que aspiraba con los dividendos del cargo a tener tiempo para leer a esos amigos que adoraba -hoy po ti, mañana por mí-.
Con esos dineros pensaba tener tranquilidad y tiempo para su obra, esa obra hecha en verso libre, y librado de la musicalidad clara y real, adobado de ese deje huero de los poemas mal traducidos de otras lenguas, y tiempo para decidir si un adjetivo debe ir o no en tal sitio. No en función poética, ni de musicalidad o formal del poema, sino por su matiz significativo. Porque el poeta da toda la razón a lo que dice, importándole poco cómo lo dice, eso que otros llaman forma. Y su ideología, esa inflamación de las meninges, era lo realmente importante en el poema, junto al adjetivo adecuado según la irritación del día meningítico.
El señor funcinario cultural por designación política libre, por parte de los ganadores de elecciones amañadas por leyes enrevesadas y falsas, nombrado por el cacique en mando, decidió darse un paseo para ver el día electoral de mayo. Por la tarde seguiría leyendo, dosificado, al amigote en sus ocurrencias filosóficas. Hoy por ti, mañana por mí.

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Hay algo que se llama libertad, y que debes ejercer libremente. Así que distingue bien entre las ideas, los sentimientos, las pasiones, la razones y similares. No son respetables; pero cuida, que detrás hay personas. Y las personas, "per se", es lo único que se respeta en este lugar. Muy agradecido y mucha salud. Que no te canse.